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domingo, 21 de julio de 2019

CARTA DEL DESESPERO




Te escribo a ti, que me llevas contigo.

Decidí un día alojarme en tu ser y veo que todavía no me has soltado. Es extraño porque no suelo ser algo cómodo ni beneficioso. 
Con el tiempo pensé que me quedaría fuera y que tendría que buscar a otro ser en quién alojarme; pero no ha sido así. Parece ser que te encuentras cómoda conmigo, que ya has aceptado mi compañía mas que a ti misma y ¿sabes? me entristece apreciar que no seas capaz de decidir, que te acomodes sin probar otras cosas.
Has conseguido que mi igual se instale en mí y sea yo quien esté desesperado de comprobar que te da igual, que ya me utilizas como si fuera imprescindible cuando lo imprescindible es tu reacción para que me vaya.

¡Qué extraños sois los seres humanos! Os lamentáis de desespero pero os instaláis en él. Ahora ya tengo la duda si es el desespero quien os atrapa o vosotros lo atrapáis.

Para que yo desaparezca has de reaccionar, buscar, hacer, pensar, dejar de lamentarte, dejar de sufrir por voluntad.
Y por si no lo sabes, también yo estoy desesperado; pero, al contrario que tú, no soy humano y no puedo reaccionar.

Tú tienes la capacidad de reaccionar y dejarme fuera de ti. Ahí ya no puedo ayudarte, hasta aquí puedo llegar.
Tú pareces no aburrirte de mí, parece que hasta te gusta mi compañía; pues que sepas que a mí me engrandeces y no soy nada beneficioso si me hago más grande.

Te conozco muy bien, llevamos mucho juntos. Déjame salir ya y prueba algo diferente; pero ¡prueba!

Te lo dice el desespero que llevas dentro.

El desespero



sábado, 20 de julio de 2019

CARTA A UN COMPLETA DESCONOCIDA



Hola, 
te escribo esta carta por si en algún momento la ves, puedes y quieres leerla. De seguro, que tú sí me conoces porque llevas siempre a mi vera; pero hoy decido escribirte esta carta.

A pesar de los años recorridos, a pesar de no haber dejado de buscar puerto al que llegar, a pesar de haber tenido a tu alrededor muchas personas te has sentido sola, a pesar de ser tu peor enemiga, sobrevives aunque no saborees el placer del amor.
Te escribo para que te des cuenta de cuanto has alcanzado, de cuanto has dejado ya atrás, de que todavía tienes oportunidad de amar y ser amada, de sentirte orgullosa que no lo estás, de  olvidar cuanto malo puedas haber vivido y recordar a quienes te han hecho vivir momentos bonitos.
Te escribo porque aunque estoy contigo, te siento una completa desconocida. 
Sé de tus miedos, de tu pánico a confiar; de dejarte llevar por la necesidad.
Ahora estás haciendo un viaje con una maleta ligera de equipaje; tal vez halles por el camino la forma de llenar ese vacío que tanto sientes y que tanto te hiere.
Sobre todo te escribo para que no lo dejes. Te siento cansada, harta y desesperada. Aun así, no abandones. Descansa, llora, grita, pero no abandones.
Te sientes carga, pesada, desmotivada, triste, y también fuego, volcán, tormenta, huracán. 
Te aseguro que te arrepentirás muchísimo más si abandonas que continuando aunque no sepas a dónde vas, ni por qué. 
Tienes la oportunidad de ser tú, de confiar en ti, de aceptarte y sentirte bien contigo misma. 
Solo cuando te quieras a ti serás libre y serás capaz de llegar al lugar que te proporcione bienestar.

No obstante, te pido disculpas por si mis palabras te molestan de alguna manera porque esta carta está dirigida a un completa desconocida.
Solo deseo que de algo te sirva si es que llegas a leerlas.


Rosa Mª Villalta Ballester

MEJOR AHORA


Mejor ahora que en otro momento,
sofocar el fuego de un ardiente cuerpo,
dejar gemir, sollozar, salivar, humedecer,
sentir el calor que de repente abrasa,
dejarse llevar por el intenso vibrar,
sentir los pechos que están a rebosar,
liberar el sexo que busca salida hallar,
dejar a los dedos en el océano surcar,
sentir ese pene erecto que en la mano,
esa flor que abre y cierra sus entrañas,
esos pezones duros que al ser rozados,
 no pueden sino excitarse más.
Mejor ahora que en otro momento,
notar cómo entran a la vez los dedos 
cómo el pene se agranda como un rey
y su dueño, ahora con gran fricción,
 en su miembro gran movimiento,
y su mano todavía a más velocidad,
hace a su miembro eréctil todavía más;
ahora, se encoge todo, vibra, contrae,
y su leche caliente expulsa, ya es locura..
Mejor ahora que en otro momento,
el clítoris excitado pierde todo control,
notando el fuerte oleaje del océano
que, sin cesar, deja la mente de lado
y ..., te transporta en ese naufragio,
y ..., te dejas llevar, ... sin presagio,
perdición, caos, contraer intenso,
y ... dejar, dejar al orgasmo actuar.
Mejor ahora que en otro momento,
momento que el sexo se presenta,
sus miembros bien lo demuestran,
y se siente su gigantesco aumento,
y se advierte locura, caos, vibración,
y se naufraga, dejándose arrastrar,
... no hay marcha atrás, ... locura,
ahora ... y no en otro momento.

Rosa Mª Villalta Ballester.








viernes, 19 de julio de 2019

COMPARARSE



Compararse entre personas es un absurdo,
pero es algo que la persona hace a menudo.

Desear la belleza es algo muy común,
aunque no sea la que no se puede comparar,
pues aunque la verdadera hermosura no se vea,
se puede hallar más allá de los ojos y el mirar.

La persona rica no es aquella que más tiene,
no es quien más cosas acumula por su valor,
sino quien sabe enriquecer a su alrededor,
quien hace de todas las cosas materiales 
un hoguera para alumbrar a quien no ve.

La inteligencia lo es por comparación,
pues para ser inteligente ha de haber torpes,
pero la torpeza no ha de despreciarse,
porque no hay inteligencia si no hay torpeza
y nada inteligente es no darse cuenta.

El don de las personas es incuestionable,
comparar el don no lleva a ninguna parte,
cada cual tiene su incuestionable valor,
compararse no es nada aconsejable,
cada cual ha de admitir sus limitaciones,
pues no hay ser humano que sea perfecto,
mas la perfección jamás en nadie hallará.

Rosa Mª Villalta Ballester

SIN EDAD


El amor se puede no hallar
sí el placer hacer realidad,
sin que exista media naranja,
si el cuerpo es puro fuego,
si necesita ser escuchado,
si con solo el propio rozar
el orgasmo sale a su paso,
si el corazón tiene su latir
sin mirar edad ni porvenir,
si la sangre se siente fluir
y los nervios su intervenir,
¿qué mejor instante tener
que ése en el que tu ser
no tiene control ni poder?
¿Qué éxtasis no aprovechar
que no requiere de otro igual
sino dejarse tan solo llevar
por esa sensación del sexo
que sin habla ni momento
necesita su hambre saciar?
El amor se puede no hallar,
sí el orgasmo puro y fugaz.



Rosa Mª Villalta Ballester


jueves, 18 de julio de 2019

¡CÓMO SE VA EL TIEMPO!



El tiempo pasa de forma tan rápida que lo que, lo que hace poco era un deseo, un sueño, ahora ya es pasado.
Todo esto me provoca miedo, mucho miedo; no melancolía, por lo que fue sino pánico a dejar de tener a quienes tengo. ¡Y cómo pasa de rápido!
No me gusta esa sensación de aceleración, de pérdida, de no volver a.
Para lo único que me sirve todo esta angustia es para apreciar lo que realmente hay ahora, no lo que podrá pasar si pasa, o lo que fue que ya no es.
Y aunque me sirva, aunque aprecie este mismo instante, siempre está la angustia del pasar, de pérdida, de algo que ya no está, que ya pasó. Parece que fue el otro día cuando esperábamos la navidad y ahora es verano. Y esperábamos las vacaciones de verano y ya es navidad.
Porque el tiempo pasa de una manera abismal y no me gusta. No me agrada sentir en cada momento que ahora mismo ya pasa, que el instante de hace un instante ya no es.
Y no quiero entrar en bucle que a nada me lleva. Pero, mientras estaba expresando esto, ya pasó el tiempo.

Rosa Mª Villalta Ballester

miércoles, 17 de julio de 2019

SENTIR NADA MÁS




Ya nada importa el pudor,
ni las formas ni cómo surgió;
nada que no sea algo entre los dos;
nada que el éxtasis no consiga,
que no provoque liberación,
importa no perder la pasión.
Ya no hay edad que ocultar,
ni lugar al que no llegar,
ni deseo al que no satisfacer,
ni desconocer ni evitar ni fallar,
hay lo necesario para todo turbar.
Y si no está esa piel que roce,
esa lengua que el océano pruebe,
esos dedos que a todo lleguen,
esos miembros que se acoplen,
esas bocas inmersas una en otra,
esos gemidos que lo dicen todo,
si no existe esa otra mitad,
pero el cuerpo necesita liberar,
si los pezones duros van a estallar,
si cualquier dedo es puro volcán,
no esperes, ve a por ese orgasmo,
que  saciara tu caliente cuerpo.
Y ... ¡siente la libertad! ... ¡vuela!
¡ahora! ¡ahora! ¡ahora solo es placer!
¡Vive este intenso, deseado momento
pues, después, ya vuelve a ser deseo!

Rosa Mª Villalta Ballester