Seguidores

sábado, 6 de julio de 2019

LO QUE IMPORTA



No importan las palabras dichas
ni los sueños rotos o por cumplir;
ni una realidad llana y sencilla;
ni tampoco esperar por esperar.
Importan las acciones realizadas,
aquello que hace las fuerzas sacar,
una realidad que de fácil nada lleva,
una espera sin dejar nada escapar.
Importa aprovechar cada minuto,
sentir cada cosa que el instante da,
importa creer aunque sea un poco
y aprender del error y levantar.
Importa no pensar en qué pasará
sino vivir el ahora que quedará.

Rosa Mª Villalta Ballester

viernes, 5 de julio de 2019

EL CREER Y EL CREDO




Creer no tiene que ser religión,
un credo no supone devoción;
creer es confiar para no caer;
un credo ayuda a poder hacer;
creer no lleva siempre saber;
un credo nace sin buscar nada.
Creer conduce a confiar sin ver,
un credo nace para interceder;
creer para a un deseo acceder;
un credo para fuerzas renovar.
Y más allá de una creencia
más allá del credo que se reza,
más allá de cualquier persona,
de cualquier razón que mueva,
hay algo tal sencillo como real,
que es confiar en cada cual,
pues no hay credo ni creencia
si la persona deja de ser tal.


Rosa Mª Villalta Ballester

jueves, 4 de julio de 2019

CON LOS AÑOS



Es de humanos agradecer y tanto más cuanto la vida te da cosas buenas.
Ya no soy ni la ignorante niña ni la joven insegura.
A través de los años se aprende, aunque sea de forma lenta.
Con los años, percibes las cosas de otra manera. Comprendes que la confianza es necesaria pero que no siempre es buena. Que querer no es poder aunque la frase sea hermosa. Que muchas veces las circunstancias frenan. Y que hay demasiadas con errores de los que no siempre te levantas para continuar con fuerza.
Los años te enseñan a que hay poco o muy poco que verdaderamente te llena; que la dicha son instantes que hay que aprovechar de manera ciega. Que ciego es dejar que el tiempo pase sin darle sentido alguno. Que se puede escuchar sin que nada se entienda. Que cuanto más años pasan menos importancia se da a grandes problemas y se fija la atención en las cosas muy pequeñas.

Sí, los años, los años te abren nuevas puertas cerrando otras que jamás eran abiertas. También te enfrían, te hielan. También son el eco de que volver atrás ya no es posible y que hay que aprovechar cada instante que no escape a la experiencia.

Y es de humanos percatarse de cuanto se pierde con los años. No sería nadie realista si no se percibiese tal hecho. 
También hay que salir de la tristeza que el paso del tiempo provoca. Hay que valorar lo vivido o no y no desaprovechar el ahora.

Así, siempre es necesario ser una persona agradecida.Por lo hecho o no, por lo sentido o no. Hay que ser consciente de las circunstancias y actuar en función de ellas. No dejemos a los demás o en el contexto lo que nos pertenece a cada cual.

Cuanto más sensata sea la persona, más dichosa será. Cuanto más responsable de sí misma sea, mejor se encontrará.

Y cuanto más se dé cuenta de su responsabilidad en la vida, más y mejor vivirá este ahora y más y mejor lo recordará.



Rosa Mª Villalta Ballester

domingo, 30 de junio de 2019

NATURAL



Aquel árbol tiene un grueso tronco,
sus raíces son fuertes y profundas;
nada hace pensar en su caída,
en el abandono de su gran sombra,
en la ruptura de su inmensa huella.
Aquel atardecer que dejó su sentir,
reflejo de cuanto bello hay que vivir,
antesala de una noche sin estrellas,
estrellas que puede un futuro tengan,
en un presente que luz representa.
Aquella inquietud cuya fe muestra
la incredulidad que a nada lleva,
fuerza que se saca aun sin ganas,
misterio por el que estar de guardia.
Aquella persona que no busca nada
cercana a la humildad serena y sana
lejana del rencor y la intolerancia
aquella que sin saber el por qué,
llega al corazón cuyo latido abraza.

Rosa Mª Villalta Ballester

sábado, 15 de junio de 2019

AMOR



¿Se detiene el amor o se pierde?
Nace del corazón, no es obligación.
Es voluntario, no produce daño.
Se encuentra sin salir a buscarlo.
Quizás no se haya jamás probado.
O, puede ser, algo que dolor causó.

¿Es acaso el amor un juego de azar?
Caprichoso, instintivo, casual.
Fugaz, constante, quizás desigual.
Tal vez algo que no se espera,
se detiene, se siente, se balancea.
Es dulce, amargo, insípido, cálido.

¿Puede al amor el odio acompañar?
Del corazón, el amor y el odio.
Del silencio, distancia y serenidad.
Y con el tiempo, todo un misterio;
tristeza, dicha, oscuridad, claridad.
Odio y amor su oportunidad dar.

Amar es más que sexo practicar;
es mas que uno relación de dos;
es darle al amor la oportunidad
de alejarse más allá de cada cual
y ponerse en lugar de otro ser
sin pensar en recibir cuanto se da.


Autora: Rosa Mª Villalta Ballester

martes, 11 de junio de 2019

VOLUNTAD






La voluntad es algo más que importante;
algo necesario para conseguir un ideal;
empezar de nuevo no es fracaso alguno
es, contrariamente, ganar oportunidad.
Nada bueno hay en llorar sin hacer nada
aumentando la pena, dejando bienestar;
nada se consigue si tan solo se espera,
y solo el esfuerzo derrota al malhumor.

Hay que desear de verdad hacer algo
si se siente la vida pasar de largo;
no hay mayor error que la vida dejar 
por no hacer ni tampoco intento poner.
No importa no acertar y mucho errar;
pues sin errores aprendizaje no hay;
equivocarse y caer es muy probable;
levantarse es voluntario y da coraje.

Hay que buscar si algo se quiere hallar;
probando, sufriendo y disfrutando;
y no hay que responsabilizar a otro
si se experimenta un continuo fracaso;
será responsabilidad de cada cual
el manejar su día a día y continuar,
o aparcar el placer que se puede lograr.

Aprender que cada cual es como es,
que compararse es solo naufragar
que hay que aceptar las limitaciones,
y hacer de la vida un inmenso querer.
Y quererse uno mismo es empezar
el primer paso para al otro alcanzar;
y aceptar al otro sin quererlo cambiar,
pues el mayor tesoro es comprender
que el cariño sólo tiene su lugar
cuando a nadie se desea moldear.

Autora: Rosa Mª Villalta Ballester

domingo, 9 de junio de 2019

FELICIDAD






Pensar en la felicidad,
es utopía, nada real;
pues la felicidad se vive,
no se sueña ni piensa.
Feliz es aquella persona
cuya vida sabe aprovechar
con las cosas más pequeñas
cuya riqueza escondida está.
Feliz es saber siempre dar
sin a cambio nada esperar;
sin recordar en un momento
cuánto se aprecia y se da.
Feliz es siempre el que hace
y no está solo pensando
pues la acción alimenta
pensar seguir haciendo algo.
Feliz es quien de verdad ama
sin forzar ni obligar a nada;
quien sabe dejar marchar
a quien con él no quiere estar.
Pensar en la felicidad,
es perder la dicha ahora
despreciando la oportunidad;
y cada vez que se ignora,
mayor tristeza en el alma hay.

Autora: Rosa Mª Villalta Ballester