No podía alcanzar eso tan hermoso del amor
ni tampoco el baile de dos cuerpos en sintonía;
podía fantasear y soñar en correrse en soledad;
mientras la noche avivaba su ardiente deseo;
mientras se derrite acariciándose su fogoso sexo
e imagina cómo su entrepierna se humedece,
cómo siente su vibrar y erizarse la piel gimiendo
y cómo, arqueándose, movimientos sensuales,
el orgasmo deja ese cuerpo caliente en sintonía.
Rosa Mª Villalta Ballester
El propio encuentro con el placer, el deseo y prender-se de su propia alquimia.
ResponderEliminarTan cálido como sensual, Rosa.
Mil besitos con cariño y feliz noche ♥
Gracias Auroratris por tu visita y tan acertada interpretación.
EliminarSaludos.
Hacerse el amor a uno mismo es darse placer en silencio , pero no resta sensualidad al acto en sí ..Me gusto como lo enfocaste .
ResponderEliminarUn fuerte abrazo !!
Así es Campirela.
EliminarCuando las personas no tienen suerte en tener esa otra mitad, no tiene porqué no haber sensualidad.
Gracias por tu visita y tus palabras.
Saludos.
La lírica de este poema es exquisitamente sensual. Tu poesía tiene esa magia de adentrarnos en cada verso.
ResponderEliminarSaludito
Agradezco Yessykan tu visita y tus palabras.
EliminarSaludos.
Poema sensual.. que habla de sensualidad, mismo sin otra persona amada...la sensualidad está acá, adentro de nosotros...
ResponderEliminarHay que explorarla... y darse a si mismo todo el amor que se merece!!!
Besos Rosa!!!
Arde tu poesía, Rosa, e ilumina.
ResponderEliminarTe felicito. Abrazos, amiga!!